Nutrición y belleza
La relación de la alimentación con el balance hormonal y la tiroides
¿Te ha pasado que te recomiendan una dieta “buenísima” para perder peso y después de probarla por un tiempo parece que no obtienes resultados? Más allá del éxito de una dieta, lo importante es tener una alimentación consciente, saber qué comidas nos ayudarán, pues los órganos de nuestro cuerpo dependen mucho de ello para funcionar de forma óptima y sentirnos bien.
Dentro de nuestro cuerpo todo se encuentra conectado de forma increíble. Para demostrarlo, hoy nos enfocaremos en la tiroides, un órgano pequeño pero con una función enorme. Por ello platicamos con Lorena Torres, nutrióloga, especialista en salud intestinal y balance hormonal que cuenta con más de 10 años de experiencia en el tema.
A Lorena le apasiona apoyar en el mejoramiento de la salud y calidad de vida de las personas, más allá del peso o composición corporal, logrando un enfoque integral. Por ello, nos ayudó a entender mejor la importancia de la tiroides para el resto del cuerpo y cómo la alimentación puede influir en su funcionamiento.
¿Qué es la tiroides?
La tiroides es una glándula pequeña que se encuentra a la altura del cuello, debajo de la manzana de Adán.
Se encarga de producir y mantener un balance de hormonas que ayudan a la correcta función de nuestro metabolismo. Es decir, de todas las funciones que están conectadas en nuestros diferentes sistemas: nervioso, digestivo, respiratorio, cardiovascular, por mencionar algunos. Todo esto con el objetivo de que te sientas bien.
Principales red flags que nos pueden ayudar a detectar si hay un mal funcionamiento:
- Cansancio excesivo
- Pérdida de nuestra capacidad de atención
- Cambios en la calidad de sueño
- Cambios drásticos de humor
- Síntomas digestivos como: gastritis, reflujo, estreñimiento
- Tener manos o pies fríos
- Resequedad en la piel
- Pérdida de cabello
- Uñas quebradizas
- En el caso de las mujeres, alteraciones en el ciclo menstrual
Si presentas dos o más de estos síntomas, es recomendable acudir a consulta con un especialista en salud para obtener un diagnóstico personalizado.
Factores que pueden causar el mal funcionamiento de la tiroides
- Predisposición genética: Hay mayor probabilidad si algún familiar del lado materno también tiene alguna enfermedad relacionada con la tiroides.
- Estrés: ya sea a nivel fisiológico o emocional.
- Mala calidad en la nutrición, hidratación o de sueño.
⚠️ OJO: las pastillas para adelgazar y las anticonceptivas también pueden propiciar el desarrollo de problemas en el funcionamiento de la tiroides.
¿Cómo se detectan los tipos de enfermedades de la tiroides?
Es necesario que el profesional de la salud indique realizar un ultrasonido de tiroides y un análisis de laboratorio con un perfil tiroideo completo que incluya los niveles de:
- TSH: hormona estimulante de la tiroides.
- Hormonas T3 y T4 libres.
- Anticuerpos antitiroideos.
¿Qué padecimientos se pueden detectar con estos análisis?
Hipertiroidismo:
Una mayor producción de hormonas que ocasionan una sobreestimulación en el resto de los órganos corporales. Suelen aumentar la frecuencia cardiaca, la temperatura del cuerpo y la sudoración.
Hipotiroidismo:
Disminución en la producción o funcionalidad de las hormonas tiroideas en los órganos del cuerpo. Tiende a bajar la frecuencia cardiaca y la temperatura corporal.
Tipos de hipotiroidismo:
- Subclínico: Sólo una de las tres principales hormonas tiroideas están fuera de rango. Ya sea la hormona TSH, T3 o T4. Con mayor frecuencia la TSH, que es la hormona estimulante de la tiroides y por lo tanto la más sensible a cambios.
- Clínico: Dos o más de estas hormonas están fuera de rango.
- Hipotiroidismo de Hashimoto: El nivel de anticuerpos anti-tiroideos es elevado. Esto tiende a inflamar y a atacar la propia glándula, provocando hipotiroidismo en el corto, mediano o largo plazo.
Los primeros dos tipos se tratan de un desbalance hormonal, mientras que el tercero ya es considerada como una enfermedad autoinmune.
“Los padecimientos de tiroides no se curan, se controlan”.
El hipotiroidismo se refleja en una serie de cambios:
- A nivel de la piel: la producción de colágeno y la elastina disminuyen. La piel se vuelve reseca, en casos con Hashimoto, las pieles se vuelven propensas a la rosácea.
- En el sistema digestivo: No tenemos la misma eficiencia para digerir los alimentos y aumentan los malestares como: gastritis, estreñimiento, reflujo, entre otros.
- De forma emocional: disminución en la dopamina y serotonina, que son neurotransmisores relacionados al bienestar y la felicidad, con periodos de irritabilidad, depresión leve o tristeza profunda.
¿Cómo cuidar de la tiroides desde la alimentación?
No hay un alimento que por sí solo genere un desbalance hormonal en la tiroides, más bien es la cantidad y la frecuencia de consumo.
Tip: Evitar consumir en medida de lo posible lácteos y gluten.
Incluir alimentos vegetales: Variedad de verduras, frutas, leguminosas y cereales, pues ayudan a tener una microbiota intestinal más diversa que absorba de mejor manera los nutrientes.
Nota: Mientras más variada y completa sea tu alimentación, tu estado de nutrición será más óptimo y en consecuencia, te sentirás mejor.
Los cambios en nuestros hábitos no suceden de la noche a la mañana, pero pueden ser más fáciles de implementar si cuentas con el apoyo y guía de un especialista en nutrición.
Su papel es precisamente que puedas aprender o reaprender a disfrutar de la comida, que logres una buena alimentación que te brinde todos los nutrientes necesarios y darte recomendaciones que puedan ayudarte a llevar un estilo de vida sostenible que sirva a largo plazo.
Como nutrióloga, Lorena está convencida que la nutrición es la base para poder alcanzar una versión balanceada y más feliz, a su manera, sin extremos ni restricciones.Por eso, si quieres lograr sentirte bien, procura cuidar tu alimentación y estilo de vida en la medida de tus posibilidades.
¿Te gustaría conocer más tips de la Lic. Lorena Torres? Puedes seguirla en:
IG: https://www.instagram.com/lore_nutrition/?igshid=YmMyMTA2M2Y%3D
